La Junta de Castilla y León edita un atlas forestal con más de 1.300 imágenes sobre la realidad social e histórica y la situación actual de la gestión del medio naturalEl libro, en cuya elaboración han participado 69 expertos, presenta un enfoque "integrador" ya que incluye textos escritos por autores de máximo nivel técnico y científico
El consejero de Medio Ambiente en funciones de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, presentó hoy la edición de un atlas forestal publicado por el Gobierno regional, y que cuenta con más de 900 páginas y más de 1.300 imágenes, con el objetivo de mostrar la realidad social e histórica del medio forestal de la Comunidad, así como la situación actual de la gestión del medio natural.
La elaboración de la obra, que ha contado con la participación de 69 expertos, se apoya en un importante contenido gráfico, acompañado de un enfoque "integrador" que incluye textos escritos por autores de máximo nivel técnico y científico. "Somos pioneros en un atlas de este tipo, porque no lo tenía ninguna comunidad y tampoco existía a nivel nacional", destacó Fernández Carriedo.
La obra contiene 900 fotografías de 116 autores, 83 dibujos de nueve ilustradores, 48 gráficos y esquemas, 40 mapas elaborados para el libro, 37 copias de mapas antiguos y 37 reproducciones de obras de arte, así como 28 de fotografías aéreas, ortofotos, imágenes satélite e infogramas.
Una parte importante de los autores se aglutinan en dos grandes campos: el de los geógrafos e historiadores por un lado y el de los técnicos responsables de la gestión de medio ambiente, por otro.
El libro está elaborado bajo la batuta del director general de Medio Natural, Mariano Torre, así como el catedrático del Departamento de Silvopascicultura de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes de la Universidad Complutense de Madrid, Luis Gil. El atlas recorre la historia de 97 montes de la Comunidad, elegidos por su interés histórico, y su valor natural y productor. Empieza por la reconstrucción de la vegetación que se desarrolló desde la última glaciación durante el Neolítico, pasando por la Edad Media y se detiene en los momentos más "emblemáticos y en los que mejor dibujan la interacción entre hombre y naturaleza". "Este periplo en el tiempo finaliza en nuestros días con una visión realista de la compleja realidad de nuestro medio forestal, desde los puntos de vista natural y socioeconómico, algo que da claves de futuro", dijo Fernández Carriedo.
La obra se estructura en cinco bloques. Éstos son 'El bosque natural', que da una visión global de la realidad del medio forestal de la Comunidad; 'Claves del pasado', que revela el pasado del paisaje natural; 'Gestión y usos del monte', que expone punto a punto la realidad de la gestión del medio natural; 'El futuro de los bosques', que presenta un diagnóstico de la política forestal actual; y por último, el atlas incluye una adaptación del Mapa Forestal de España a escala 1:400.000.
El consejero apuntó también hacia los destinatarios de la obra. En este sentido, servirá de documentación al personal, con titulación universitaria o no, relacionado con el sector forestal; así como titulados del campo de humanidades y el público en general.
Aspectos reseñables
Fernández Carriedo se refirió también a los aspectos más reseñables del atlas, entre los que destacó la evolución del paisaje. "Hace 5.000 años, las masas forestales de Castilla y León eran similares a las actuales. Desde entonces, la presencia humana aumentó la presión sobre los bosques, disminuyendo su extensión", señaló.
El consejero comentó el cambio existente entre las ordenanzas de montes del Medievo a la planificación de la gestión en la actualidad, algo que también se aprecia en la obra. Para ello, se remontó al siglo XIX, en el que se "consolidó" una ciencia que sirve de respaldo a la gestión, gracias a la creación de la primera Escuela de Ingeniería de Montes. "A pesar de las nuevas ordenanzas y los avances científicos, la disminución de la cubierta vegetal fue progresiva hasta la mitad del siglo XX", subrayó. De hecho, el consejero precisó que en los últimos 25 años, la superficie forestal arbolada en la región ha crecido en 850.000 hectáreas y en los últimos 60, se ha recuperado tanto volumen de bosque, "como el que había hace 5.000 años".
La obra incluye también un inventario de montes emblemáticos de Castilla y León. Entre los 97, se seleccionaron el Pinar de Hoyocasero (Ávila), Monte Hijedo (Burgos), Riocamba (León), Dehesa de San Pedro (Palencia), Dehesa de Boyal de Espeja (Salamanca), Navafría (Segovia), Pinar Grande (Soria), La Santa Espina (Valladolid) y Carvajal (Zamora), entre otros.
Asimismo, Fernández Carriedo informó sobre un estudio de la fauna del bosque que incluye el atlas. Al respecto, recordó que en los últimos 15 años la población de oso pardo cantábrico ha pasado de 60-80 ejemplares, a los 105-130 actuales, al igual que la cigüeña negra o el águila imperial, dos especies en peligro de extinción y que han duplicado sus poblaciones.
Igualmente, la obra incluye varios capítulos que cuentan con las colaboraciones de escritores o autores literarios de la región, como por ejemplo, la de Luis Mateo Díez, que muestra, desde el mundo del arte, la visión del monte.
Por último, la obra expone diverso material histórico inédito sobre el medio rural y natural, así como cartografía de la vegetación.
Por su parte, Luis Gil declaró que Castilla y León "es de las pocas comunidades que tiene un sentido forestal claro". Además, hizo hincapié en la mayor diversidad que existe en especies de menor tamaño, sin embargo las especies arbóreas que tienen una mayor capacidad "para soportar el cambio". "La prueba es que aquí surgió una glaciación y supuso un cambio momentáneo pero se recuperó en beneficio para los bosques", dijo.
Exposición
Posteriormente, el consejero inauguró la exposición 'Atlas Forestal de Castilla y León', que se puede ver hasta el próximo 30 de junio en las instalaciones comunes de la propia Consejería de Medio Ambiente, "de una forma sencilla y amena". En ella se destaca los aspectos más llamativos e interesantes de toda la información recopilada de esta obra, con casi 200 fotografías "para transmitir al público la riqueza y diversidad forestal de Castilla y León, su importancia dentro de la economía regional y los aspectos más llamativos".
La muestra consta de 22 paneles fotográficos de un tamaño de dos por dos metros, impresos sobre lona y montados sobre estructuras metálicas con base de madera de haya.
El consejero de Medio Ambiente en funciones de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, presentó hoy la edición de un atlas forestal publicado por el Gobierno regional, y que cuenta con más de 900 páginas y más de 1.300 imágenes, con el objetivo de mostrar la realidad social e histórica del medio forestal de la Comunidad, así como la situación actual de la gestión del medio natural.
La elaboración de la obra, que ha contado con la participación de 69 expertos, se apoya en un importante contenido gráfico, acompañado de un enfoque "integrador" que incluye textos escritos por autores de máximo nivel técnico y científico. "Somos pioneros en un atlas de este tipo, porque no lo tenía ninguna comunidad y tampoco existía a nivel nacional", destacó Fernández Carriedo.
La obra contiene 900 fotografías de 116 autores, 83 dibujos de nueve ilustradores, 48 gráficos y esquemas, 40 mapas elaborados para el libro, 37 copias de mapas antiguos y 37 reproducciones de obras de arte, así como 28 de fotografías aéreas, ortofotos, imágenes satélite e infogramas.
Una parte importante de los autores se aglutinan en dos grandes campos: el de los geógrafos e historiadores por un lado y el de los técnicos responsables de la gestión de medio ambiente, por otro.
El libro está elaborado bajo la batuta del director general de Medio Natural, Mariano Torre, así como el catedrático del Departamento de Silvopascicultura de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes de la Universidad Complutense de Madrid, Luis Gil. El atlas recorre la historia de 97 montes de la Comunidad, elegidos por su interés histórico, y su valor natural y productor. Empieza por la reconstrucción de la vegetación que se desarrolló desde la última glaciación durante el Neolítico, pasando por la Edad Media y se detiene en los momentos más "emblemáticos y en los que mejor dibujan la interacción entre hombre y naturaleza". "Este periplo en el tiempo finaliza en nuestros días con una visión realista de la compleja realidad de nuestro medio forestal, desde los puntos de vista natural y socioeconómico, algo que da claves de futuro", dijo Fernández Carriedo.
La obra se estructura en cinco bloques. Éstos son 'El bosque natural', que da una visión global de la realidad del medio forestal de la Comunidad; 'Claves del pasado', que revela el pasado del paisaje natural; 'Gestión y usos del monte', que expone punto a punto la realidad de la gestión del medio natural; 'El futuro de los bosques', que presenta un diagnóstico de la política forestal actual; y por último, el atlas incluye una adaptación del Mapa Forestal de España a escala 1:400.000.
El consejero apuntó también hacia los destinatarios de la obra. En este sentido, servirá de documentación al personal, con titulación universitaria o no, relacionado con el sector forestal; así como titulados del campo de humanidades y el público en general.
Aspectos reseñables
Fernández Carriedo se refirió también a los aspectos más reseñables del atlas, entre los que destacó la evolución del paisaje. "Hace 5.000 años, las masas forestales de Castilla y León eran similares a las actuales. Desde entonces, la presencia humana aumentó la presión sobre los bosques, disminuyendo su extensión", señaló.
El consejero comentó el cambio existente entre las ordenanzas de montes del Medievo a la planificación de la gestión en la actualidad, algo que también se aprecia en la obra. Para ello, se remontó al siglo XIX, en el que se "consolidó" una ciencia que sirve de respaldo a la gestión, gracias a la creación de la primera Escuela de Ingeniería de Montes. "A pesar de las nuevas ordenanzas y los avances científicos, la disminución de la cubierta vegetal fue progresiva hasta la mitad del siglo XX", subrayó. De hecho, el consejero precisó que en los últimos 25 años, la superficie forestal arbolada en la región ha crecido en 850.000 hectáreas y en los últimos 60, se ha recuperado tanto volumen de bosque, "como el que había hace 5.000 años".
La obra incluye también un inventario de montes emblemáticos de Castilla y León. Entre los 97, se seleccionaron el Pinar de Hoyocasero (Ávila), Monte Hijedo (Burgos), Riocamba (León), Dehesa de San Pedro (Palencia), Dehesa de Boyal de Espeja (Salamanca), Navafría (Segovia), Pinar Grande (Soria), La Santa Espina (Valladolid) y Carvajal (Zamora), entre otros.
Asimismo, Fernández Carriedo informó sobre un estudio de la fauna del bosque que incluye el atlas. Al respecto, recordó que en los últimos 15 años la población de oso pardo cantábrico ha pasado de 60-80 ejemplares, a los 105-130 actuales, al igual que la cigüeña negra o el águila imperial, dos especies en peligro de extinción y que han duplicado sus poblaciones.
Igualmente, la obra incluye varios capítulos que cuentan con las colaboraciones de escritores o autores literarios de la región, como por ejemplo, la de Luis Mateo Díez, que muestra, desde el mundo del arte, la visión del monte.
Por último, la obra expone diverso material histórico inédito sobre el medio rural y natural, así como cartografía de la vegetación.
Por su parte, Luis Gil declaró que Castilla y León "es de las pocas comunidades que tiene un sentido forestal claro". Además, hizo hincapié en la mayor diversidad que existe en especies de menor tamaño, sin embargo las especies arbóreas que tienen una mayor capacidad "para soportar el cambio". "La prueba es que aquí surgió una glaciación y supuso un cambio momentáneo pero se recuperó en beneficio para los bosques", dijo.
Exposición
Posteriormente, el consejero inauguró la exposición 'Atlas Forestal de Castilla y León', que se puede ver hasta el próximo 30 de junio en las instalaciones comunes de la propia Consejería de Medio Ambiente, "de una forma sencilla y amena". En ella se destaca los aspectos más llamativos e interesantes de toda la información recopilada de esta obra, con casi 200 fotografías "para transmitir al público la riqueza y diversidad forestal de Castilla y León, su importancia dentro de la economía regional y los aspectos más llamativos".
La muestra consta de 22 paneles fotográficos de un tamaño de dos por dos metros, impresos sobre lona y montados sobre estructuras metálicas con base de madera de haya.
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