Y. AZNAR / R. PÉREZ | ZARAGOZA
Publicado Miércoles , 28-10-09 a las 10 : 02
Recuperar la masa forestal y agrícola quemada en los incendios que este verano arrasaron más de 11.000 hectáreas en la provincia de Teruel va a costar cerca de 70 millones de euros, aunque se estima que las pérdidas superaron los 93 millones.
Ayer, representantes de los empresarios aragoneses se reunieron en la capital turolense para presentar un plan de reforestación y pedir a las administraciones mayor celeridad en las actuaciones. Advierten que si no se trabaja con rapidez los municipios afectados acabarán «en la más absoluta pobreza». Por eso, exigen al Gobierno central que sea él quien asuma el coste de la reforestación y lo haga a la mayor brevedad posible, declarando a las localidades afectadas como Zona de Actuación Urgente.
El pasado mes de agosto el Ejecutivo de Zapatero publicó un real decreto con medidas urgentes para paliar los daños producidos por los incendios forestales en varias Comunidades autónomas. Las ayudas todavía se están tramitando, de ahí que los empresarios hayan denunciado la lentitud con la que está actuando la administración central. Y es que «cuando más tardemos, el daño será más irreversible», aseguraron desde la patronal aragonesa.
Mirar al futuro
El presidente de los empresarios aragoneses, Jesús Morte, explicó que la situación es «alarmante» para Aragón y «terrorífica» para Teruel y pidió ayudas «urgentes» para evitar que la zona entre en una profunda crisis. Hay que «salvar el futuro» de estas localidades y recordó que además de la masa forestal, en los incendios se perdieron infraestructuras, campos y viviendas de turismo rural.
La fuente de ingresos de estas zonas se vieron muy mermadas por los incendios y en algunos casos el fuego acabó con el sustento económico de algunas familias turolenses. De ahí que Morte subrayara que «actuar rápidamente y valga lo que valga» para que la recuperación de esta zona sea una realidad en el menor tiempo posible.
Fomentar el empleo
El plan que ayer presentó la patronal aragonesa refleja que reforestar la zona supondrá una importante inyección para el empleo de la zona. Según los cálculos que manejan los empresarios, el plan generaría entre 150 y 180 empleos directos durante unos siete u ocho años, a los que habría que añadir un 15 ó 20 por ciento más de empleos indirectos
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