Problemas en la actividad de los agentes forestales en Castilla y León

visto en nortedecastilla.es

Si en un paseo por el monte se topa con un agente a pie o en bicicleta, no se asombre. Parece que los fondos de Medio Ambiente, una de las consejerías que más ha sufrido los recortes del presupuesto de la Junta, no dan más de sí. El departamento que dirige la vicepresidenta María Jesús Ruiz ha dado instrucciones de aminorar al máximo el gasto corriente, incluido el combustible, y eso atañe también al carburante que mueve los vehículos que utilizan agentes y celadores para velar por el amplio patrimonio forestal autonómico.
«Los agentes medioambientales no tienen combustible. Hay zonas en los que el tope de gasóleo por vehículo se ha fijado en 70 euros. Eso supone no poderse mover y eliminar servicios de carácter no urgente. Puede que se dé el caso de que haya que hacer algún informe y el coche no tenga combustible para desplazarse», critica José Miguel García, coordinador de la secretaría autonómica de la Federación de Servicios Públicos de UGT.
García explica que cada todoterreno es utilizado normalmente por tres empleados públicos, «que apenas pueden hacer 530 kilómetros al mes. Si el propietario de un monte quiere alguna gestión, deberá tener en cuenta que, o lo plantea a principio de mes, o nadie podrá acercarse para hacer el informe de autorización».
El viceconsejero de Desarrollo Sostenible, José Manuel Jiménez Blázquez, admite restricciones de combustible «que no son nuevas». El presupuesto de la consejería en 2010 y 2011 ha salido muy tocado por la reducción de ingresos públicos, sobre todo en la parte de gasto corriente. En ese capítulo se incluyen los carburantes. «Se han dado instrucciones para reducir ese gasto, que ahora coincide con el coste tremendo que tiene el gasoil», reconoce el alto cargo, quien asegura que desde la Consejería no se han estipulado topes concretos de gasto mensual en euros. «No se han dado instrucciones en ese sentido, cada provincia y cada 'cuartel' son diferentes y son los jefes de servicio los que distribuyen el recorte. Hay que hacer compatible las restricciones con la labor sobre el terreno, que me consta que se lleva a cabo», explica Jiménez. Las protestas por las restricciones de combustible han llegado a la Consejería de Medio Ambiente. «Sí que hay quejas en este sentido y es normal, porque esas restricciones hacen más difícil realizar las labores, pero el recorte es en todos los ámbitos, en las familias, en las empresas... y la administración no está al margen. Hay que adaptarse a la situación», asegura el viceconsejero.
Para cámaras
El carburante es gasto corriente en técnica presupuestaria, pero es «imprescindible» para que los agentes medioambientales puedan desplazarse por las carreteras, caminos y pistas forestales que articulan la ingente superficie de hectáreas forestales que tienen a su cargo. «Hay dinero para montar cámaras en montes de Zamora y Soria, que no son funcionales, pero no para combustible», critica el dirigente de UGT. «La estructura presupuestaria de un presupuesto público es compleja. No se pueden hacer trasvases alegremente, porque son fondos condicionados muchas veces. Si la UE destina partidas a construir depuradoras, son para eso, no se pueden emplear en comprar combustible», replica José Manuel Jiménez.
Las solicitudes de entrevistas para abordar los recortes de carburantes y el operativo contra incendios de este año esperan respuesta en el departamento de María Jesús Ruiz.