El Consello Económico demanda a la Xunta una estrategia forestal a largo plazo

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ANA BLASCO / REDACCIÓN | A CORUÑA
Galicia necesita una estrategia forestal a largo plazo y respaldada por un amplio consenso social, según demandó a la Xunta hace solo dos meses el Consello Económico y Social que preside la exalcaldesa de Vigo, la popular Corina Porro. Esta entidad recomienda en su informe sobre el anteproyecto de la ley de montes que la norma se acompañe de la financiación suficiente para gestionar el monte de modo que se garantice su pervivencia y la mayor estabilidad posible.

El dictamen advierte de que la ley autonómica debe garantizar la productividad y la conservación de la superficie forestal así como la protección efectiva de los ecosistemas de los bosques gallegos. El informe del órgano consultor recomienda además al Ejecutivo gallego la ampliación de la red de espacios naturales protegidos de Galicia como paso imprescindible para conseguir una conservación y protección eficaz.

El Colexio Oficial de Biólogos de Galicia (Cobga) coincide con las reclamaciones del Consello Económico e Social (CES) y también demanda una mayor atención para los parques naturales porque, a su juicio, están en una situación de "vulnerabilidad" ante los incendios , tal y como ha quedado demostrado en el desastre natural que ha arrasado el corazón de las Fragas do Eume.

La insuficiente inversión en materia de prevención es, para los biólogos gallegos, una de las causas de la mala situación en la que se encuentran estos ecosistemas. De hecho, sostienen que "no se cumple completamente lo que marca la ley". Para remediarlo, consideran que se deben primar los medios de prevención frente a los de extinción y proponen la implantación de una política forestal en este sentido.

"En los últimos años mermaron mucho los recursos materiales y humanos. Necesitan mucho más apoyo económico, más presupuesto", reclama la decana del Cobga, Mercedes Casal. Entre otros aspectos, destaca el menor control que se ejerce sobre el avance de las especies invasoras o el deficiente cuidado de los espacios silvestres. "La vegetación puede prender en cualquier sitio", lamenta.

Como medida esencial, el colectivo de biólogos considera que se debe ordenar y organizar ese "combustible" vegetal creando perímetros de seguridad alrededor de las casas, cortafuegos y rozas bajo el cableado eléctrico y en el contorno de las infraestructuras. Casal denuncia que "no se cumple completamente lo que marca la ley contra incendios". Entre otras cosas, expone, por el elevado coste que estas tareas suponen para las arcas públicas o por la falta de limpieza de terrenos particulares cuyos propietarios son mayores, residen lejos o se despreocupan. En estos últimos casos, considera que la Administración debería actuar de oficio, "por un bien común".

Los efectos ecológicos que los incendios forestales ocasionan cada año en Galicia "son muy graves y afectan principalmente a diferentes ecosistemas de agua dulce, del litoral y a sistemas marisqueros", advierte el colegio, que recuerda que estas secuelas perduran muchos años en el medio. Subraya que las pérdidas de patrimonio biológico "son muy elevadas" e indica que una de las más claras es la pérdida de diversidad de especies, como en el caso del Parque Natural Fragas do Eume.